Cada sistema de puertas está compuesto por un conjunto
electroneumático en donde cada pieza por más pequeña que sea, juega un rol muy
importante. Cuando alteramos su funcionamiento, es decir, cuando evitan que se
cierren con normalidad o usan fuerza bruta para intentar abrirlas, se producen
los daños, daños que atentan contra su seguridad, daños a la unidad y a veces
daños irreparables.
Al forzar las puertas, los pistones, sellos y gomas
empiezan a fugar, creando una disminución de presión en el sistema y por lo
mínimo la puerta no podrá cerrar y repararlas no es un trabajo de minutos ni
horas.
Muchos ven a las personas obstaculizando las puertas y
dirán "eso no es mi problema" o por evitar una discusión no les dicen
nada, pero ocurre el gran daño y en el mismo andén donde usted embarcó informan
que la unidad debe ser desalojada pues se considera inútil cuando una puerta
está dañada, pues ahí sí se vuelve un problema para ti porque vas a llegar más
tarde de lo que habías planificado
El daño en las puertas a veces no se manifiesta al momento,
incluso se puede manifestar mientras el tren ya ha emprendido la marcha y eso sí
es peligroso.
Pero la vida que es
nuestro mayor maestro, empieza a enviarnos señales, y situaciones que nos van
diciendo que llegó el momento de cerrar ese ciclo, deja cerrar bien esas
puertas, alejarte de esas personas que no permiten que avances.
Cerrar puertas te permite
avanzar, a soltar y aceptar que nada es permanente, solo el cambio y que cuando
nos resistimos a esos cambios vamos a sufrir, por ello cuando aceptas lo que
es, llegas a entender el aprendizaje de algo te ayudó a evolucionar
internamente. ¡¡Aprende a Cerrar puertas Conductor, Ser feliz es una decisión
diaria!!
Luis André Morales
Motivador Institucional
Instagram: @Conductordetren
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